El Manchester United derrotó por 2-1 al Liverpool en un clásico del fútbol inglés entre dos equipos en dificultades, tras el que los Reds siguen sin conocer la victoria después de tres jornadas.
Con Cristiano Ronaldo (que solo jugó los últimos minutos) y Harry Maguire en el banquillo, el equipo que entrena el holandés Erik ten Hag logró la victoria con los tantos de los internacionales ingleses Jadon Sancho (16) y Marcus Rashford (53).
Un desconocido Liverpool recortó diferencias por medio del egipcio Mohamed Salah (81), pero cuando ya era demasiado tarde para evitar la primera victoria de los ‘Red Devils’ esta temporada.
“Todo gira alrededor de la actitud. Y se ha visto una buena actitud en la cancha: hubo comunicación, lucha, espíritu de equipo y se ha visto de lo que son capaces, porque son futbolistas jodidamente buenos”, reivindicó el extécnico del Ajax tras el partido.
“Debemos ser humildes y creo que podríamos haber jugado mucho mejor, con un poco más de control, dar más pausa al juego, ser más peligrosos”, añadió Ten Hag, que también se refirió a la suplencia de Ronaldo y Maguire.
“Tengo un plantel y necesito utilizarlo. Tenemos 50 o 60 partidos por temporada, por lo que partido tras partido elegimos quién juega. Maguire y Ronaldo son jugadores increíbles y van a tener un papel a jugar en un futuro próximo”.
Con este resultado, el United (que había perdido sus dos primeros partidos) sale del pozo de la clasificación (14º) y supera a un Liverpool (16º) que, tras dos empates iniciales, sigue sin conocer la victoria y queda ya a 7 puntos del líder Arsenal y 5 de su gran rival por el título, el Manchester City.
“No es el resultado que queríamos, eso seguro. Ha sido un partido con muchas interrupciones”, lamentó Klopp.
“Ellos empezaron muy agresivos y era evidente lo que iba a pasar: tuvieron las primeras ocasiones y marcaron primero. Después reaccionamos y jugamos a lo que queríamos, pero nos faltó suerte en algunas ocasiones, sobre todo a pelota parada. Hubiese sido positivo haber llegado al descanso con 1-1”, añadió el técnico germano del Liverpool.
Los dos equipos habían mostrado en este inicio de temporada muchos problemas, sobre todo a nivel defensivo, y, en toda lógica, el clásico inglés se decidió por los errores de los ‘Reds’, incomprensibles en un equipo que aspira a todos los títulos.
Cristiano en el banquillo
En una primera parte de absoluto dominio local, el United estuvo cerca de adelantarse a los 10 minutos con un disparo de Anthony Elanga, uno de los más destacados de su equipo, que se estrelló en la madera.
El primer tanto llegó seis minutos después, cuando los locales realizaron una gran jugada ofensiva que culminaron con un pase de Elanga para Jadon Sancho, que aprovechando el desbarajuste defensivo del equipo de Jürgen Klopp, batió a Alisson Becker desde el punto de penal.
El arquero brasileño evitó el segundo de los locales con una gran atajada a un lanzamiento de golpe franco directo del danés Christian Eriksen, que se colaba por la escuadra (25).
La única jugada de peligro visitante antes de la pausa fue un centro de James Milner que Bruno Fernandes rechazó… a su propia portería y fue el argentino Lisandro Martínez el que salvó el gol en la línea (41).
La sentencia llegó poco después de la reanudación, cuando Jordan Henderson no llegó a controlar un balón en el centro del campo, Anthony Martial lanzó en profundidad para Rashford y el internacional inglés superó a Alisson en el mano a mano (53).
El Liverpool, que había dado una imagen muy pobre durante los primeros 80 minutos, estuvo cerca de marcar en un rechace contra su portería de Lisandro Martínez que desvió a córner David de Gea (81).
En el saque de esquina, Salah aprovechó un rechace del portero español y ante la pasividad de la defensa recortó diferencias, aunque sin tiempo ya para buscar nada más.
La victoria es una inyección de moral para los aficionados del United. Muchos de ellos se manifestaron antes del partido para reclamar la marcha de la multimillonaria familia Glazer, propietaria de la entidad.
Otro motivo para ser optimistas: el internacional brasileño Casemiro firmó su contrato hasta 2026 (con una temporada más opcional) y el ya exjugador del Real Madrid se presentó ante sus nuevos aficionados en Old Trafford.