Culiacán, Sinaloa.- Las atenciones más frecuentes en las últimas semanas en el Hospital Pediátrico de Sinaloa han sido por enfermedades diarreicas y respiratorias.
El director del nosocomio, Carlos Mijaíl Suárez Arredondo, explicó que esto se debe a las condiciones climáticas que atraviesa el estado: por un lado, las altas temperaturas y, por otro, las lluvias que han generado un repunte de estos padecimientos.
Hasta hace unos meses las enfermedades diarreicas encabezaban la lista de atenciones; sin embargo, con la llegada de las lluvias, las afecciones respiratorias han alcanzado niveles similares, principalmente en niñas y niños de entre 2 y 5 años.
“Seguimos, mucha enfermedad gastrointestinal entre 20 a 30 casos, pero empiezan a repuntar las enfermedades respiratorias ya, dos fenómenos, empieza a llover muchísima humedad y aunque sigue haciendo mucho calor, pues ya se va a empezar a diluir este calor y vamos a empezar con descenso a las temperaturas. Entonces ya los pacientes que tienen alguna situación respiratoria, suelen recaer mucho en esta temporada y estamos también más o menos entre 20 y 30 casos, ya prácticamente se emparejaron”.
El especialista hizo un llamado a madres y padres de familia a proteger a sus hijas e hijos de los cambios bruscos de temperatura y de las condiciones adversas del clima, recordando que por suerte la mayoría de los casos han sido leves y los pacientes reciben alta médica en poco tiempo, pero lo mejor es tomar precauciones.
“Afortunadamente no, hemos tenido casos de deshidratación leve que representan el 10 % de los casos, uno o dos pacientitos cada dos o tres días que requiere hospitalización, sobre todo para hidratarse, mejorar sus condiciones, sus estancias son cortas, se quedan dos o tres días y se pueden ir a casita afortunadamente”.
Aunque no se han registrado casos de gravedad, la autoridad médica insistió en que la prevención es la mejor medida: una buena hidratación, higiene constante de manos, consumo de agua potable y evitar cambios drásticos de temperatura son claves para reducir riesgos en la niñez.