El alpinismo de altura siempre es un baile al filo de la navaja, y esta vez tuvo un desenlace fatal para el renombrado alpinista extremo alemán Luis Stitzinger. El originario de Allgäu, conocido por sus espectaculares descensos con esquís desde las montañas más altas del mundo, murió mientras trabajaba en un proyecto en solitario en el Himalaya. Ahora, un equipo de ayudantes está tratando de recuperar su cuerpo del Kangchenjunga, a 8.586 metros de altura, y llevarlo a la capital de Nepal, Katmandú.
Los restos mortales del guía de montaña y esquí serán trasladados al segundo campamento alto para ser trasladados desde allí, según Mingma Sherpa, responsable de la empresa Seven Summit Treks, que organiza la expedición.
Triste despedida
En tanto, la esposa de Stitzinger, la reconocida escaladora de altura Alix von Melle, se despidió públicamente de su pareja en la cuenta compartida de Instagram. “Los 25 años a tu lado fueron los mejores de mi vida”, publicó von Melle el miércoles después de que el día anterior se encontrara el cadáver del experimentado líder de la expedición. “Las montañas eran tu vida y la nuestra. El Kangchenjunga, tu gran sueño de toda la vida, que todavía deseabas con todas tus fuerzas cumplir. Tus ojos brillaban de emoción cuando hablabas de él”.
El Kangchenjunga es la tercera montaña más alta del mundo y uno de los picos de 8.000 metros o más escalados con menos frecuencia, porque es muy difícil de alcanzar, tiene una estructura de cumbre muy irregular y un tramo final extremadamente difícil desde el último campamento hasta el punto más alto.
Según Billi Bierling, responsable de “Himalayan Database”, el registro de todas las ascensiones de la expedición a las montañas de Nepal, Stitzinger había llegado a la cumbre sin oxígeno embotellado y con su propio equipaje tras 22 horas a la altura extrema a última hora de la tarde del jueves.
Último intento por la cima
Según su último mensaje de radio, Stitzinger quería dejar su depósito de esquí a una altitud de unos 8.300 metros para llegar al próximo campamento. Nunca llegó luego de que lo atrapara la oscuridad.
“Escalar una montaña alta y luego esquiar era su marca registrada”, dijo Manfred Lorenz, codirector general del operador turístico DAV Summit Club, para el cual Stitzinger había organizado y dirigido expediciones durante muchos años. El hombre de 54 años era un guía de montaña muy prudente y cuidadoso. Pero “el montañismo de altura es siempre un cruce de fronteras, funciona cinco veces bien y una vez, lamentablemente, sale mal”. “Su muerte nos afecta mucho”, enfatizó el guía de montaña Stefan Winter, muy conocido de Stitzinger, en nombre del Club Alpino Alemán.
Información: https://www.dw.com/es/alpinista-extremo-alem%C3%A1n-muere-durante-reto-en-el-himalaya/a-65785657