La estadounidense Claudia Goldin es profesora de la Universidad de Harvard y este lunes se ha convertido en la tercera mujer en ganar el Premio Nobel de Economía entre los 92 premiados en la historia de esta categoría. “Ha descubierto los principales factores que explican las diferencias de género en el mercado laboral”, según la Real Academia Sueca de las Ciencias.
Goldin ha sido recompensada por la Real Academia Sueca de las Ciencias por “ampliar nuestra comprensión sobre los efectos de (la participación) de las mujeres en el mercado laboral”, es decir sobre la desigualdad de género en el mercado laboral.
Sus investigaciones abarcan temas como la mano de obra femenina, la desigualdad de ingresos, la educación y la desigualdad salarial entre hombres y mujeres.
“Su investigación revela las causas del cambio, así como las principales fuentes de la brecha que sigue existiendo entre hombres y mujeres”. Por ejemplo, “las mujeres están enormemente infrarrepresentadas en el mercado laboral mundial y, cuando trabajan, ganan menos que los hombres”, explica la Real Academia Sueca.
A lo largo del siglo XX, el nivel de educación de las mujeres aumentó constantemente, y en la mayoría de los países de renta alta es ahora significativamente superior al de los hombres.
Claudia Goldin ha demostrado que el acceso a la píldora anticonceptiva ha desempeñado un papel importante en la aceleración de este cambio, al abrir a las mujeres nuevas oportunidades en términos de educación y opciones profesionales.
Históricamente, una gran parte de la diferencia salarial entre hombres y mujeres en Estados Unidos podía explicarse por las diferencias en la educación y las opciones profesionales.
Pero según sus investigaciones, el grueso de esta diferencia de ingresos se da ahora entre mujeres y hombres de la misma profesión, y surge en gran medida con el nacimiento del primer hijo.
Los ganadores del año pasado fueron el expresidente de la Reserva Dederal estadounidense Ben Bernanke, Douglas W. Diamond y Philip Dybvig por su investigación sobre las quiebras bancarias que ayudó a formar la agresiva respuesta estadounidense a la crisis financiera de 2007 y 2008.