El 14 de febrero, conocido como el Día de San Valentín, puede ser visto como una combinación de amor por los demás y consumismo, mientras que para muchos representa una oportunidad para expresar afecto hacia seres queridos a través de gestos y regalos especiales, para otros puede ser una manifestación de presión comercial y gasto excesivo y es que aumenta hasta un 67% el consumo de diferentes rubros comerciales, citó docente universitaria.
Ligia del Carmen Cosío Cabanillas, adscrita a la Facultad de Contaduría y Administración (FCA) de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), hizo referencia a un estudio de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros; este estudio reveló que las personas en México priorizan el consumo de dulces, alojamiento en servicios hoteleros y restaurantes, joyería y flores en último lugar, este patrón de consumo muestra un cambio drástico en el comportamiento durante este día en particular.
Esto genera un impacto económico significativo, aprovechado por los negocios desde la segunda quincena de enero, afirmó. Además, comunicó que las personas gastan en promedio mil 500 pesos por persona durante esta fecha, una cantidad superior a lo que se gasta en el Día de las Madres.
“En los estudios sobre esta celebración se ha observado que San Valentín es el tercer día de mayor consumo en México, siendo la Navidad y el Día de Reyes los primeros en cuanto a gastos. Según un estudio de una revista de prestigio en Estados Unidos, las personas gastan en promedio 173 dólares durante esta fecha, si hacemos los cálculos correctamente, entre ambos países se gastan aproximadamente 22 mil millones de dólares”, argumentó.
La especialista en temas mercadológicos destacó que disciplinas como la administración y la mercadotecnia adoptan el día de celebración, lo que conlleva un aumento en los mercados y, por ende, en la economía de las personas. Este fenómeno sugiere una interacción compleja entre factores psicológicos y comportamentales, donde la influencia de la cultura y las prácticas sociales juegan un papel significativo en la manera en que las personas perciben y participan en eventos como el Día de San Valentín.