Información de Agencias
Culiacán, Sinaloa – Después del homenaje a la diva mexicana, la icónica actriz Silvia Pinal, su cuerpo fue cremado y sus cenizas ahora reposan en su emblemática residencia en el Pedregal. Sin embargo, su hija Alejandra Guzmán decidió llevar este recuerdo un paso más allá.
Con un gesto profundamente emotivo y único, Alejandra ha decidido transformar los restos de su madre en un diamante. Explicó que mediante un proceso que extrae fósforo y otros elementos de los huesos, se forma un diamante con un color especial que refleja la singularidad de cada individuo.
Para Alejandra, este diamante simboliza la posibilidad de mantener siempre cerca “un pedacito” de su madre, convirtiéndose no solo en una forma hermosa de recordarla, sino también en una manera de tenerla siempre presente en su vida.
¿Qué es un diamante humano o diamante memorial?
«Los diamantes conmemorativos son diamantes creados a partir de pelo o cenizas humanas de cremación».
El cuerpo humano contiene un 18% de carbono, mientras que los diamantes son carbono puro.
Los diamantes de cenizas humanas son diamantes reales hechos con las cenizas o el pelo de los seres queridos o de las mascotas, y se pueden evaluar de igual forma que un diamante natural.
La única diferencia entre los diamantes naturales y los diamantes de cenizas humanas está en su origen: los diamantes de cenizas humanas se crean a partir de cenizas de cremación, mientras que los diamantes naturales son minerales que se forman en el subsuelo a lo largo de millones de años.
El proceso de transformación de las cenizas de tus seres queridos en diamantes dura entre 6 y 9 meses (1 quilate), dependiendo del tamaño y del color deseados para el diamante humano.