En México, 12 por ciento de la población padece de una enfermedad renal crónica. Este padecimiento registra una tasa de 51 defunciones por cada 100 mil habitantes, según reportes de la Secretaría de Salud.
Las fallas renales crónicas son una enfermedad silenciosa como le sucedió a Paola, paciente con insuficiencia renal.
“Yo no tenía síntomas el primer síntoma que tuve fue anemia, y luego empecé a dejar de orinar ya no orinaba y la hinchazón, me empecé a hinchar de la cara, párpados mis manos mis pies”, contó Paola, paciente con insuficiencia renal.
Las y los especialistas del sector salud alertaron sobre este problema: “En nuestro país probablemente más del 80 por ciento de los que tienen algún grado de enfermedad renal crónica no lo saben”, añadió Ricardo Correa Rotter, médico del departamento de Nefrología y Metabolismo del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”.

Correa Rotter apuntó que “cuando hay síntomas, estas en estadio moderadamente avanzado, entonces ya cuando empiezas a tener cansancio, debilidad, te empiezas a hinchar puede ser bastante tarde”.
Paola fue diagnosticada cuando su riñón funcionaba solo en un 40 por ciento. “Antes de llegar al seguro, yo probé de todo naturista, que las vitaminas, productos milagro que no me ayudaron en nada al contrario me aceleraron el problema para llegar a diálisis”, explicó Paola.
La diálisis es un tratamiento para eliminar los desechos y líquidos de la sangre cuando los riñones ya no funcionan.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) actualmente tiene un registro nacional de casi 80 mil personas en terapia de reemplazo renal.
En el sector privado, cada sesión de hemodiálisis cuesta alrededor de mil 500 pesos, un paciente necesita al menos tres sesiones a la semana, un total de 4 mil 500 pesos.
Por ello, las y los especialistas señalaron la necesidad de realizar tamizajes tempranos para detectar a tiempo esta enfermedad, además de cuidar la alimentación.
“Sabemos que la sal es una carga importante para el cuerpo y para el riñón, incrementa la probabilidad de ser hipertensos y la probabilidad a futuro de falla renal. Esto viene asociado a todos los alimentos procesados de mayor contenido calórico no sólo es la sal si no las calorías que ingerimos”, apuntó Alexandra Arias Mendoza, jefa del departamento de Urgencias y de la Unidad Coronaria del Instituto Nacional de Cardiología “Ignacio Chávez”.
Este 13 de marzo se conmemora el Día Mundial del Riñón que busca sensibilizar sobre la importancia de este órgano y sus funciones, con el objetivo de prevenir las enfermedades renales que afectan a la población.
Información: Once Noticias