Qatar.- La Selección Mexicana de fútbol le ganó 2-1 al equipo de Arabia Saudita, pero no fue suficiente debido a la diferencia de goles con otros países. Los dirigidos por el “Tata” Martino tenían siete mundiales consecutivos llegando a la ronda de los octavos de final, pero lo ocurrido en su encuentro ante Polonia y Argentina terminó sentenciando a los mexicanos.
El primer encuentro se empató 0-0 ante el combinado de Polonia, partido donde se tuvo la pelota, había buenas conducciones, aunque no se encontraron las oportunidades de gol. Ya en el juego ante Argentina el sistema cambió: la estrategia fue defender sin la pelota y les funcionó durante 50 minutos, pero las genialidades de Messi y Fernández terminaron sepultando el partido.
El encuentro ante Arabia fue un contraste a lo visto en el torneo. México dominó con la pelota, creando oportunidades y haciendo anotaciones. Henry Martín y Luis Chávez pusieron la esperanza a tope con sus goles, pero las fallas terminaron pesando más y la selección se quedo con las ganas de avanzar.
Se vendrá un nuevo proceso, otro entrenador y nuevos jugadores de cara al mundial del 2026, pero con una Federación Mexicana de Fútbol que, según la crítica especializada, pareciera no importarle lo deportivo.