Culiacán, Sinaloa.- Puntualmente a las nueve de la mañana comenzaron a acudir diferentes agrupaciones de música de banda, mariachi y regional de Culiacán, en un festival ciudadano organizado con el fin de emitir un mensaje de paz y solidaridad en pro de los músicos, cuya labor se ha visto en crisis ante el panorama de inseguridad en la ciudad.
El escenario colocado en la avenida Álvaro Obregón ante la Catedral comenzó a atraer la atención de los transeúntes en un ambiente de festividad y júbilo en compañía de integrantes del sector restaurantero, afectado también en los últimos dos meses.
A las 11:00 de la mañana, un aproximado de 200 músicos se unieron al unísono para entonar a las afueras de Catedral “El Sinaloense”, con una pausa durante la misa del medio día para continuar con el ambiente de festividad hasta las cinco de la tarde.
José Guadalupe Barraza Salas, secretario General de la Sección 34 del Sindicato de Bandas Sinaloenses, explicó que en sus 27 años de experiencia como músico, salvo por la pandemia, no se había presentado un escenario de gravedad que le impidiera a el o a sus compañeros poder desarrollar su oficio, abordando como fue su acercamiento con la música.
“Desde pequeño tenía la inquietud de estudiar música, pero por situaciones económicas no me dejaron venir a estudiar aquí a Culiacán, si no que ya después de que recorrí parte del planeta ya pude estudiarla, pero muy poco”, dijo.
Indicó que su entrenamiento musical fue meramente práctico, de manera similar a muchos integrantes de su familia que formaron parte de agrupaciones como La Original Banda “El Limón” o “La Costeña”.
Y a pesar de que el flujo de eventos privados que requieren de sus servicios se ha mantenido bajo pese al gradual regreso de la cotidianidad, Barraza Salas considera importante que los miembros del gremio no desistan.
“Vamos a salir de esta. Todo sinaloense salimos del bache en el que estemos y hay que echarle ganas y estar a la orden del día y seguir adelante porque esto no va a poder más que nosotros”, concluyó.