La evasión del pago del IEPS por el mercado ilícito de combustibles impactó en la recaudación; en 2020, 172 cuentas bancarias fueron bloqueadas por este delito
El contrabando de combustibles dejó un boquete fiscal de 30 mil 500 millones de pesos en 2020, por la evasión del pago del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS).
De acuerdo con el Tercer Informe de Avance de la Estrategia Nacional de Seguridad, enviado por el gobierno federal al Senado, durante el año pasado el combate interinstitucional a este delito generó el bloqueo de 172 cuentas en el sistema bancario —cuyos montos sumaron 134.98 millones de pesos y 4.72 millones de dólares—, por parte de la Secretaría de Seguridad y la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF).
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) detectó 81.54 millones de litros de hidrocarburos que se introdujeron al territorio nacional sin pagar contribuciones, lo que causó un perjuicio al fisco de 534 millones de pesos.