Liz Truss se ha convertido en la nueva primera ministra británica tras ganarle a su contrincante, el excanciller Rishi Sunak, lo que fue una larga e intensa contienda por el liderazgo del Partido Conservador.
Pero, ante los importantes problemas económicos a los que se enfrenta Reino Unido este otoño, la nueva primera ministra podría terminar deseando no haber luchado tanto por el puesto.
Truss logró seducir a los miembros del Partido Conservador -los únicos que podían votar en la contienda- gracias a la simplicidad de su mensaje.
Pro
Los dos problemas más graves que enfrenta el país son la alta inflación y los altos precios de la energía.
Si bien el aumento de los precios de la energía es el factor que más contribuye a la inflación, los dos problemas no son idénticos y requerirán respuestas diferentes.
Riesgo de pobreza energética
Durante la campaña electoral por el liderazgo de su partido, Truss resistió a la presión de congelar el tope de los precios de la energía en los próximos seis meses para que las compañías de energía no pudieran imponer otro aumento.
Esto podría empujar a dos tercios de los hogares en Gran Bretaña a la pobreza energética: familias que no podrán calentar sus hogares durante el invierno a niveles recomendados.
metió reducir los impuestos, deshacerse de leyes de la Unión Europea, revertir un aumento de las cuotas del seguro nacional y suspender un impuesto a la energía verde que hace que los consumidores paguen en su factura de energía una parte destinada a proyectos ambientales.
Sin embargo, es poco probable que su período en el cargo sea sencillo en los próximos meses.
La gravedad del problema quedó ejemplificada cuando Christine Farnish renunció como directora del regulador de energía Ofgem justo antes de que Truss asumiera el cargo.
Farnish afirmó que sentía que el regulador estaba poniendo los intereses de los proveedores por encima de los intereses de los consumidores.
Inflación
Mientras tanto, la inflación subió al 10% en julio en Reino Unido, lo que significa que los precios fueron un 10% más altos en julio de 2022 que en julio de 2021.
Esta es la tasa de inflación más alta en 40 años.
Más preocupante es que el aumento de la inflación se debe no solo a los altos precios de la energía sino también a los altos precios de los alimentos.
El costo de la leche, por ejemplo, se ha disparado en un 40% solo en el último año.
Muchos de los productos que suben de precio (incluida la leche) suelen resistir a las presiones inflacionarias, lo que indica que la inflación llegó para quedarse.
Todas las acciones de Truss en el plazo inmediato se desarrollarán en este contexto.
Costos financieros y políticos
Reducir la inflación y abordar el aumento del costo de vida será difícil desde el punto de vista financiero y político.
Los confinamientos debido a la covid y la guerra en Ucrania no son los únicos factores detrás de la alta inflación.
Las bajas tasas de interés y la flexibilización cuantitativa también han contribuido a un mayor valor de los activos y un mayor gasto de los hogares desde la crisis financiera de 2008.