Ricardo Moreno, más conocido como el bombero de Culiacán ha sido el aficionado número uno de los Tomateros, pero muy pocas personas saben que tiene 60 años de servicio como “apagafuegos”.
El señor, comentó que a los 21 años empezó su carrera como rescatista al salvar a un niño que se estaba ahogando en el río.
Fue tanta la satisfacción que decidió ser un héroe sin capa e ingresó a la corporación de emergencia.
“Surgió ese niño que se andaba ahogando, como ya tenía el conocimiento de los bomberos que me enseñaron a dar los primeros auxilios fui y rescate al niño, le apliqué los primeros auxilios, logró venir a la vida, a mí me dio mucho gusto”.
El veterano señaló que ha tenido múltiples quemaduras y lesiones que lo han mandado al hospital, pero eso, no lo ha parado para salvar una vida.
“Me cayó sustancias químicas, me metí con zapatos de cordones, por ahí se me metió el líquido, me dijeron que me iba a fallar los tendones de los tobillos, no que bueno y con la oración mía me puse en manos de Dios”.
Gracias a las corporaciones de bomberos, Ricardo ha podido ir a apoyar a la selección mexicana en diferentes Series del Caribe.
“Le mando un saludo a todos los cuerpos de bomberos donde he estado yo, me han recibido con los brazos abiertos, tanto en Tijuana, Mexicali, en la Serie del Caribe, en República Dominicana y Venezuela, todas esas Series las he pasado en los cuerpos de bomberos por falta de dinero”.
Don Ricardo ya es una leyenda de Culiacán.