La fase de grupos de la Copa del Mundo femenina, a la que le queda únicamente este miércoles para verse completada, ha supuesto una barrera infranqueable para casi todas las selecciones sudamericanas.
Las primeras fechas del torneo dejaron una agradable sorpresa, la selección de Colombia, y una decepción impensada e impensable, Brasil, incapaz de alcanzar los octavos.
¿Una Colombia sin límites?
Colombia, que dio la gran sorpresa al derrotar a Alemania en su segundo partido, es el único combinado nacional que tiene garantizado su pase a octavos. Está clasificada además pese a tener aún pendiente el tercer duelo de su grupo, en el que se medirá a Marruecos con vistas a sellar el pase en la primera plaza.
El partido de las de Nelson Abadía frente al cuadro germano, uno de los grandes aspirantes al título, supuso un antes y un después para el combinado cafetero.
Tuvo además tintes dramáticos, ya que las colombianas se adelantaron por medio de Linda Caicedo en el 57’ pero vieron como Popp empataba el marcador en el 89’. Hubo que esperar hasta el descuento, el 97’, para que Manuela Venegas lograse el 2-1 definitivo.
Colombia infligió así a Alemania su primera derrota en la fase de grupos de un Mundial Femenino desde 1995 y dejó la sensación de que la Tricolor puede llegar lejos en la cita.
El fiasco brasileño
La gran decepción dentro de las sudamericanas fue posiblemente Brasil, que, por primera vez en su historia, no fue capaz de superar la primera fase de una Copa del Mundo femenina.
La ‘verdeamarelha’ quedó apeada del campeonato como tercera del Grupo F por detrás de Francia, algo que no era descabellado, pero también de Jamaica, a la que fue incapaz de superar en la última jornada.
El equipo caribeño logró aguantar las embestidas del gigante brasileño para amarrar un empate 0-0, lo que unido a la derrota en la fecha anterior ante las ‘bleues’, certifico el temprano adiós de la escuadra auriverde, que pese a su potencial sigue sin lograr una corona mundial.
La amarga participación de Argentina
Argentina también dijo adiós antes de tiempo, con la carga además de que su “muerte” en el torneo fue una crónica de una muerte anunciada.
La derrota ante Suecia en el último partido del Grupo G certificó su salida, pero al choque acudió con unas opciones de clasificarse que pese a ser matemáticamente posibles, eran prácticamente inexistentes. A ello se unió una relación con sus aficionados por momentos tormentosa.
Las jugadoras de la Albiceleste fueron ampliamente criticadas por los aficionados por su rendimiento, pero algunas incluso llegaron a ser insultadas en las redes, como Yamila Rodríguez, por el mero hecho de asegurar que su ídolo es Cristiano Ronaldo en lugar de Leo Messi.
Igualmente no fueron capaces de franquear esta primera fase del torneo ni Costa Rica ni Panamá. Ambas fueron incapaces de sumar ni un solo punto en el torneo, pero viendo la dificultad de sus respectivos grupos, la clasificación era una utopía.
Información: RFI





