El alzhéimer es la principal causa de demencia en adultos mayores de 65 años, afecta la memoria, el pensamiento y el comportamiento.
Este 21 de septiembre se conmemora el Día Mundial del Alzhéimer, oportunidad donde se aprovecha para brindar información sobre el padecimiento y desmentir mitos.
¿Qué es el alzhéimer?
Se trata de un trastorno cerebral que destruye lentamente la memoria y la capacidad de pensar y, con el tiempo, la habilidad de llevar a cabo hasta las tareas más sencillas. Las personas con alzhéimer también experimentan cambios en la conducta y la personalidad.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que a nivel global más de 60 millones de personas mayores de 65 años viven con alzhéimer, de ellas 8.1% son mujeres y 5.1% varones.
En México, aproximadamente 1.3 millones de personas tienen este padecimiento.
“Este tipo de demencia es neurodegenerativa y es ocasionada por la alteración de ciertas proteínas en el cerebro que hacen que las neuronas se destruyan gradual y progresivamente”, dijo el subdirector de Enseñanza del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía (INNN) “Manuel Velasco Suárez”, Ramiro Ruiz García.
Para el especialista, el alzhéimer se debe considerar un problema de salud pública, ya que, ante el aumento de la esperanza de vida, se estima un incremento acelerado en las próximas décadas.
Aunque se desconoce qué desencadena el alzhéimer, se tiene documentada la presencia de factores de riesgo como:
- Baja escolaridad
- Depresión no atendida
- Tabaquismo
- Sedentarismo
- Obesidad
Cuidado con los signos de alerta
De acuerdo con información de la Alzheimer´s Association (www.alz.org), existen 10 signos de alarma ante los que se debe acudir al médico, aunque no es necesario que se den todos:
- Cambios de memoria que afectan a la vida cotidiana: olvidar información recién aprendida, pedir la misma información repetidamente, depender de ayudas para hacer cosas que antes hacía solo
- Dificultad para planificar o resolver problemas
- Dificultad para desempeñar tareas habituales en la casa, en el trabajo o en su tiempo libre
- Desorientación en tiempo y lugar
- Dificultad para comprender imágenes visuales y relacionar objetos en el entorno
- Problemas nuevos en el lenguaje oral y escrito
- Colocar objetos fuera de su lugar habitual y ser incapaces de recuperarlos
- Disminución o falta de juicio para tomar decisiones
- Pérdida de iniciativa a la hora de tomar parte en el trabajo o en las actividades sociales
- Cambios en el humor o en la personalidad