Dentro de las 18 reformas constitucionales que el presidente Andrés Manuel López Obrador envió al Congreso para su discusión, está una que propone reformar el Artículo 123 para crear un “Sistema de Vivienda para Todas las Personas Trabajadoras”.
El objetivo principal de la reforma es promover el “arrendamiento social”, que se refiere a que una persona trabajadora podrá rentar una vivienda al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y su mensualidad no podrá exceder el 30 por ciento de su salario. Este beneficio se podrá adquirir después de un año de cotización.
En tanto, al Infonavit se le facultará para construir viviendas e invertir recursos para ello.
¿Y si quiero comprar?
El Infonavit continuará e intensificará su esquema actual de adquisición de vivienda a través de créditos, sin embargo, las personas trabajadoras que arrienden una vivienda tendrán el derecho de adquirirla si mantiene el pago de su renta durante 10 años.
Además, la reforma establece que se dará preferencia de arrendamiento a las personas que hayan aportado continuamente al Infonavit y aún no cuenten con una vivienda propia.
En sus motivaciones para esta propuesta, el presidente López Obrador argumentó que las personas trabajadoras no cuentan opciones formales de arrendamiento a pesar de que sí aportan al Infonavit.