Uyukar Domingo Peas, indígena ecuatoriano, lamenta que pese a la emergencia de la crisis climática países y empresas sigan destruyendo la Amazonía y no recurran a los conocimientos ancestrales de las comunidades originarias para salvar al planeta.
“La Amazonía debe quedar intacta para la juventud y el resto de la humanidad”, asegura con determinación este hombre de 58 años de la nación achuar, que lleva tres décadas luchando contra la destrucción de la selva.
Si todavía quedan “reservorios de recursos naturales” es “gracias a la práctica que nosotros tenemos para protegerlos durante miles de años”, dice a la AFP.
El 80% de los bosques tropicales del planeta -cerca de 800 millones de hectáreas -se encuentran en territorios indígenas, según las organizaciones que los defienden.
Aprovechando que a lo largo de la semana han desfilado por la tribuna de la Asamblea General de la ONU en Nueva York los líderes del planeta que han hecho un alegato para frenar una catástrofe climática que se avecina, indígenas de todo el mundo han participado la Semana del Clima, un conglomerado de eventos independientes.